Nuestra madrina del capítulo II de Vividoras, dedicado a la Salud Femenina, Noelia Galán, nos habla sobre su experiencia como superviviente de cáncer de mama y explica aquello que no te cuentan en el diagnóstico.
Noelia, expedicionaria del Reto Pelayo Vida Annapurna Bike 2018 y co-fundadora de Mamazonas, dice que su gran apoyo en los momentos difíciles fue su familia. “Aferrarme a mi familia fue lo que más me ayudó”, nos dice Noelia. “Ellos son la base de mi vida. Mis hijos, mi padre y mis hermanos me dieron la fuerza para llevarlo de la mejor manera posible. El amor que siento por ellos me motivó a intentar no preocuparlos y a mantenerme bien”. Además, mantener ciertas rutinas y hobbies, como nadar, caminar e incluso correr, le proporcionaron un sentido de normalidad que fue crucial para su bienestar psicológico. No fue consciente de que, en un momento, de un día para otro, la vida la iba a cambiar. La incertidumbre la alcanzó, y nunca puso en tanto valor la salud.
Poner en valor la salud
La salud es, para Noelia, el bien más preciado. “No somos conscientes de lo valiosa que es la salud hasta que la perdemos”, reflexiona. Antes de su diagnóstico, Noelia nunca había estado en un hospital más allá del parto de sus hijos. Esta experiencia le enseñó a valorar y cuidar su salud mucho más. “Hay que cuidarse siempre, apreciar la buena salud y no darla por sentada”. Por eso, a su ‘yo’ de hace 10 años la diría “¡no pierdas tu esencia!”. El aprendizaje que se lleva de esta experiencia es que hay que disfrutar, vivir cada momento y que enfrentarse a cualquier desafío, requiere una actitud positiva.
El miedo al cáncer siempre estuvo presente en la vida de Noelia, especialmente después de perder a su madre a una edad temprana por esta enfermedad. “Tenía un miedo brutal, incluso pánico, a tener cáncer. Siempre me hacía controles por mi cuenta, a pesar de que me decían que no era necesario por mi edad”. Al llegar el diagnóstico, el miedo fue abrumador, pero también le permitió curar muchas heridas. “El poder superar el cáncer ha sanado muchas heridas”.
La mayor incertidumbre de Noelia: el bienestar de sus hijos
Actualmente, la mayor incertidumbre de Noelia es el bienestar de sus hijos. “Solo pienso en que sean felices y que tengamos salud. Si llega otra experiencia negativa, la enfrentaremos y la superaremos juntos”. El aprendizaje que se lleva es claro: “Vivir cada momento, no anticiparse y disfrutar de la familia, las amistades y las cosas que te gustan”. Noelia tiene claro que ser una Vividora es tener las herramientas suficientes para enfrentar cualquier desafío con una actitud positiva. “Ser una Vividora es enfrentarse a la vida y a los problemas de la mejor manera posible, siempre con la mejor de las sonrisas. Ponerse los tacones o las deportivas y salir a vivir”.
Las mujeres vivimos situaciones de salud únicas, por eso #Vividoras 💙 te apoya a aprender gestionar la incertidumbre, sea cual sea.
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